Photos by Eilon Paz for Dust & Grooves
Rutherford Chang no es un coleccionista cualquiera, ya que convirtió su afición en una exposición titulada We Buy White Albums en
la Galería Recess, en el SoHo de Nueva York.
Chang tiene una colección de casi 700 copias de la primera edición del vinilo, cuya portada la ideó el británico Richard Hamilton en 1968, y se convirtió, entre otras cosas, en la obsesión de este joven artista.
En la exposición, los visitantes pueden escuchar cada una de las copias, que están ordenadas por número de serie. Además, pueden apreciar las distintas portadas, modificadas con extraños y excéntricos dibujos o pinturas realizadas por sus antiguos dueños.
Asimismo, el principal objetivo de Chang es grabar
digitalmente los discos de su colección y documentar cada portada. Pero
ninguno está a la venta, él sólo los compra, sin importar en qué
condiciones se encuentren.
“Muchos están en mal estado y rayados. Sin embargo, considero que en cuanto peor estado estén, son mas interesantes”, confiesa. Para Chang, representan “artefactos culturales” y afirma que “el resurgimiento de los vinilos es una reacción hacia la ausencia de la condición física en la música digital”.
En diálogo con Infobae, Chang cuenta: “Lo mínimo que pagué por una copia fue un dólar y lo máximo, veinte”. Acerca de su copia preferida, expresa: “Mi favorita es la número “025649”, porque es de edición argentina y tiene todos los títulos en español”.
Al preguntarle sobre su ejemplar más raro, Chang responde: “Cada uno de los que tengo es único, y en esta última media década se ha convertido en un artefacto”.
Sin embargo, el trabajo de este coleccionista no finaliza en la mera
exposición, pues tiene planeado sacar un LP doble, con las grabaciones
digitales de todas sus copias. “Será como escuchar mil discos a la vez”,
promete.
Aquí puede escucharse una grabación completa de uno de los vinilos de la colección de Chang.
El fotógrafo israelí Eilon Paz hizo un excelente fotoreportaje en el sitio Dust & Drooves. Vea las imágenes.
la Galería Recess, en el SoHo de Nueva York.
Chang tiene una colección de casi 700 copias de la primera edición del vinilo, cuya portada la ideó el británico Richard Hamilton en 1968, y se convirtió, entre otras cosas, en la obsesión de este joven artista.En la exposición, los visitantes pueden escuchar cada una de las copias, que están ordenadas por número de serie. Además, pueden apreciar las distintas portadas, modificadas con extraños y excéntricos dibujos o pinturas realizadas por sus antiguos dueños.
Asimismo, el principal objetivo de Chang es grabar
digitalmente los discos de su colección y documentar cada portada. Pero
ninguno está a la venta, él sólo los compra, sin importar en qué
condiciones se encuentren.“Muchos están en mal estado y rayados. Sin embargo, considero que en cuanto peor estado estén, son mas interesantes”, confiesa. Para Chang, representan “artefactos culturales” y afirma que “el resurgimiento de los vinilos es una reacción hacia la ausencia de la condición física en la música digital”.
En diálogo con Infobae, Chang cuenta: “Lo mínimo que pagué por una copia fue un dólar y lo máximo, veinte”. Acerca de su copia preferida, expresa: “Mi favorita es la número “025649”, porque es de edición argentina y tiene todos los títulos en español”.
Al preguntarle sobre su ejemplar más raro, Chang responde: “Cada uno de los que tengo es único, y en esta última media década se ha convertido en un artefacto”.
Sin embargo, el trabajo de este coleccionista no finaliza en la mera
exposición, pues tiene planeado sacar un LP doble, con las grabaciones
digitales de todas sus copias. “Será como escuchar mil discos a la vez”,
promete.Aquí puede escucharse una grabación completa de uno de los vinilos de la colección de Chang.
El fotógrafo israelí Eilon Paz hizo un excelente fotoreportaje en el sitio Dust & Drooves. Vea las imágenes.
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