El número 9 de la calle Madryn de Liverpool no será derribado. El hogar en que nació Richard Starkey (Ringo Starr) el 7 de julio de 1940 no será presa de
los bulldozer gracias a la presión popular.
los bulldozer gracias a la presión popular.
En 2010, el Ayuntamiento de Liverpool anunció su intención de demoler 445 viviendas de
un barrio humilde de la ciudad para «regenerar» la zona. La casa del
exBeatle, un pequeño adosado en el que solo vivió unos meses, era una de
ellas.
Las asociaciones Save Britain's Heritage («Salvemos el patrimonio británico») y Empty Homes («Hogares vacíos») se pusieron en marcha, junto a los vecinos de la ciudad, para detener el plan urbanístico.
Los
fans del grupo pidieron, además, que se protegiese la casa igual que la
de John Lennon, Paul MacCartney y los estudios de Abbey Road,
declarados de interés turístico nacional.
La petición popular llegó
hasta el ministro de Vivienda del país, Grant Shapps,
que ayer visitó el barrio. Tras reunirse con el alcalde de Liverpool,
informó de que se conservarían algunas casas, empezando por la de Ringo
Starr. «Es uno de los ejemplos más significativos de la Beatlemanía. Un
recordatorio de ladrillos y mortero de su enorme influencia en la música
británica», declaró Shapps.
Una de cal y otra de arena
El antiguo domicilio del músico será restaurado y puesto a la venta junto
a una treintena de casas contiguas. No obstante, más de 400 viviendas
de «Welsh Streets», nombre con el que se conoce la comunidad, no correrán la misma suerte.
Hace
más de un año, el ministro de Vivienda publicó un escrito en el que
declaraba que antes de demoler el edificio, se aseguraría de que «todas
las opciones» habían sido consideradas. Las plataformas de defensa del
barrio consideran que no lo ha hecho, y denuncian que el gobierno municipal pretende «taparles la boca» conservando la casa de Ringo y derribando el resto de las viviendas.
«El número 9 de Madryn Street no debe ser usado como una 'cortina de humo' para esconder el escandaloso derribo de miles de viviendas victorianas útiles
pertenecientes a gente corriente de Inglaterra», opina Save Britain's
Heritage sobre el «indulto selectivo» de las autoridades. Salvar la casa
del músico y renunciar al resto es una «victoria pírrica», en palabras de Clem Cecil, director de la organización.
Otra
agrupación que defiende la recuperación de «Welsh Streets», Merseyside
Civic Society, asegura que están orgullosos de «salvar una pieza clave del patrimonio de los Beatles»,
pero tiene que ser parte de una recuperación integral de la zona.
«Tenemos una larga lista de gente que quiere volver a vivir en estas
casas», aseguran, «todo lo que necesitamos es un poco de ayuda de
"nuestros amigos" el alcalde Anderson y el ministro Shapps».
No hay comentarios:
Publicar un comentario